La influencia del Color en nuestra vida

Un tema importante que tiene que ver con nuestra vida y la Radiestesia es el color. El color es uno de los elementos más poderosos de nuestro entorno; es lo primero que notamos al entrar en un lugar. Está comprobado que la luz coloreada es percibida por todo el cuerpo, no sólo por la vista como hasta hace poco se creía, e influye poderosamente en nosotros en todos los planos: físico, mental, emocional y espiritual. Integrando sinérgicamente la teoría de la cromoterapia, las cinco transformaciones de la medicina tradicional china y el Feng Shui, las características y efectos de los colores son los siguientes:

Rojo: favorece la conexión con la Tierra, el arraigo con nuestras actividades y el instinto básico de supervivencia. Facilita la recuperación de las ganas de vivir, la creatividad, supera la fatiga crónica y ayuda a curar la anemia. Es útil para emplear en pequeñas áreas (toques), sólo para personas con los problemas mencionados. Salvo en los casos especialmente indicados, debe evitarse en los dormitorios, cuartos de estudio y salas de relajación y meditación. Es eficaz para las zonas destinadas a la actividad física. Está asociado con el chakra raíz (o basal o coccígeo) y el elemento Fuego. Se neutraliza con  verde azulado.

Anaranjado: favorece la sexualidad y la emotividad. Facilita la curación de enfermedades de los órganos sexuales, de la vejiga urinaria, los intestinos y el apéndice. Es el color social, apto para centros comunitarios, lugares de reunión, salas de estar, ambientes destinados al trabajo creativo y todo espacio donde se reciben invitados. Unos toques de anaranjado en cualquier ambiente operan como antidepresivos. Es perjudicial para personas nerviosas. Está asociado con el chakra sexual (o sacro o gonadal).

Amarillo: favorece el autodominio y la vitalidad. Facilita la curación de enfermedades del estómago, el bazo, el páncreas, el hígado, la vesícula biliar, las glándulas suprarrenales y las vértebras lumbares. Ayuda a superar nostalgias del pasado, diabetes y variaciones cíclicas de temperamento que se manifiestan por autoritarismo, ira y agresividad unas veces y cobardía, pasividad y sumisión otras. Es adecuado para bibliotecas, cuartos de estudio y cualquier lugar que requiera concentración; conviene contrarrestar su efecto hiperestimulante con áreas menores de color azul o violeta. Combinado con marrón es especial para los comedores. El amarillo limón (verdoso) es ideal para las cocinas. Está asociado con el Chakra solar (o plexo solar) y el elemento Tierra. Se neutraliza con violeta azulado.

Verde: favorece la capacidad de expresar el amor, tanto a sí mismo como a los demás, la armonía interior, la autoestima y la compasión. Facilita la curación de problemas del timo, el sistema inmunitario, el aparato circulatorio, el aparato respiratorio y las vértebras dorsales. Especial para habitaciones de hospital y cuartos familiares destinados a enfermos y convalecientes. Está asociado con el Chakra cardíaco (o corazón) y el elemento madera. Se neutraliza con magenta o rojo violáceo.

Azul: favorece la clariaudiencia, la comunicación, el ascendente sobre los demás y la voluntad. Facilita la curación de enfermedades de las glándulas tiroides y paratiroides, la cavidad bucal, las cuerdas vocales, la tráquea, las vértebras cervicales y el metabolismo del calcio. Resulta especial para los dormitorios. Está asociado con el Chakra laríngeo (o garganta). Se neutraliza con amarillo anaranjado.

índigo: favorece la intuición, la clarividencia. Ayuda a curar problemas oculares, olfativos y auditivos, sinusitis y desequilibrios endocrinos. Es el color óptimo para zonas de oración, contemplación y meditación. Está asociado con el chakra frontal (o tercer ojo). Se neutraliza con amarillo anaranjado.

Violeta: favorece la sincronización entre ambos hemisferios cerebrales; promueve la percepción extrasensorial. Facilita la curación de problemas del sistema nervioso, neurosis, cefaleas, problemas psíquicos. Es especial para mitigar condiciones de sobreexcitación mental, también induce el sueño profundo relajado. Es el color ideal para el
dormitorio de los insomnes. Está asociado con el Chakra coronario (o corona). Se neutraliza con amarillo verdoso.

Blanco: añadido a cualquier color, le incorpora mayores cualidades espirituales; representa la positividad y elimina la negatividad. Está asociado, junto con el violeta, al Chakra coronario (o corona).

Rosado: evoca sentimientos amorosos y es el color universal de la curación. Combate la prepotencia Yin (= obligar apelando a la compasión), más frecuente en las mujeres. Está asociado, junto con el verde, al Chakra cardíaco (o corazón).

Del libro: RADIESTESIA INTEGRAL P. Ricardo Luis Gerula. Ed. Kier

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